MACROBOTELLONES
J .M. Ferreira Cunquero
Asimilamos ya, qué pena, como parte del paisaje urbano, a mozalbetes que, en las primeras horas mañaneras, llevan tal trancazo encima, que los pobres no saben si van o vienen.
Salamanca da la impresión de estar vendiendo, bajo la cuerda universitaria, las virtudes de un paraíso para el ocio alcoholero y el desmadre. La marcha nocturna de nuestra ciudad, debe ser una de las más reconocidas y admiradas del suelo patrio por lo que cuentan nuestros visitantes. Pero una cosa es reunirse viviendo con métodos de juerga la noche y otra muy distinta es empinar el codo hasta perder el rumbo.
Una de las claves para entender este asunto me la dio un vecino temporal que estaba matriculado en
Pensar que toda la juventud está implicada en estas nuevas coordenadas del desmadre, estoy seguro que es injusto, pero la cosa no es para tomársela a pitorreo, cuando en los hospitales comienza a ser habitual la comparecencia de cierta chavalería con comas etílicos que cantan y cuentan la locura de este tiempo enamorado de la incomunicación, el monótono ruido discotequero y el alcohol adherido como producto esencial para seguir tirando.
Lo que resulta paradójico y chocante es la colaboración manifiesta de nuestra Universidad en esas concentraciones juveniles donde el colocón, disfrazado bajo un bondadoso y amable rostro botellonero, puede poner en marcha el reloj del enganche a esa locura que inicia el peligroso camino hacia la evasión inconsciente.
Escribir sobre este tema, que debería preocuparnos a todos, genera el riesgo de ser tildado uno de vejestorio o carcamal, por ir a la contra de ciertos modismos escalofriantes.
La juventud, como en cualquier época, es el embrión social que dinamiza la esperanza de un futuro casi siempre incierto. Su valor es tan trascendental, que ver estas movidas licoreras y esas danzas matinales sin equilibrio, causan la extraña sensación de que algún componente de esta sociedad consumista y globalizada precisa urgentemente algún ajuste.
Claro que lo de la colaboración de
El Adelanto de Salamanca....22.11.07
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