Con fray Romualdo en los aledaños de la la Sierra de Gredos |
Hay quienes piensan que, una vez derrocado el dictador sirio, llegan los demócratas. Me pregunto qué será ahora de los cristianos.
Los hijos del Santo de Asís llevan cientos de años en aquella tierra. Son dueños de unas propiedades adquiridas a lo largo del tiempo. Sus iglesias han convivido al lado de las mezquitas, siendo muy respetados por su labor por el resto de religiones que allí han convivido sin problema alguno. En la tv Al Jazeera hemos podido ver cómo Damasco muestra sus calles llenas de gente que festeja este momento. Lo importante es que se ve la ciudad tranquila.
Esperemos que sea para mejor este cambio, pero que nadie piense
que la democracia, como la entendemos nosotros, va a llegar por medio de las
armas.
Ahora estarán todos los países vecinos pendientes de meter sus uñas para rascar el oro de las oportunidades y cobrar viejas facturas.
Con Israel y Turquía a la cabeza, el enjambre de intereses
que ha llevado a Siria de desastre en desastre a lo largo de su historia, afila sus dientes…
Qué pena que un país tan hermoso, tan empachado de tradición y arte, lo hayamos dejado destruir entre todos de una forma tan miserable. Qué pena me dan los pobres sirios que regresarán desde los campos de refugiados a las escombreras de Alepo…
Qué triste que las miserias humanas sigan propugnando
gobernantes de estratagemas oscuras borrachas de odio.
Hoy rezaré por Siria recordando a mi primo Romualdo que dejó
su vida en aquella tierra, por la que dio y se dio con cuanto tuvo al lado de
los franciscanos.
A pocos días del noveno aniversario de su muerte en Damasco, resplandece su mensaje de paz y denuncia: https://www.youtube.com/watch?v=rUXxYD7-Ki0
No hay comentarios:
Publicar un comentario